Frente a frente…

En este espacio hemos compartido reflexiones sobre el poder de cada uno de nosotros a enfrentarnos a situaciones nuevas que nos asustan y no sabemos con certeza si seremos capaces de conseguir el éxito, tanto personales como profesionales. Precisamente por la asiduidad con la que tenemos que enfrentarnos a ellas es por lo que escribo estas líneas ligadas a profundizar en la reflexión.
Cuando tenemos que hacer frente a una situación nueva y, en muchos casos, motivada por un desencadenante inesperado y doloroso, la primera reacción es decirme a mi mismo “yo puedo” aunque simultáneamente alguien me repite sin cesar “no lo conseguirás”.
Sabemos que quién nos lanza estos mensajes es nuestro segundo yo (lo que llamamos saboteador), pero tiene mucha fuerza si permites que se asiente en tu ánimo y decisión. Te produce ansiedad, dudas de tus capacidades y temes, ante todo, fracasar.
No es fácil gestionarlo pero siempre hay vías que nos funcionaran. No podemos simplemente negarlo sin más, porque seguirá ahí. Debemos utilizar una estrategia adecuada a cada uno que nos ayude a minimizar su presencia y liderazgo en nuestra actuación.
Cuando hablo de estrategia no me refiero a poner en positivo sin más los mensajes de negación que me llegan: “no podrás-puedo hacerlo”, “no estás preparado-tengo los recursos”, “los hay mejores que tú-yo tengo mucho que aportar como los demás”, etc, etc…..
Según la experiencia y aprendizaje adquirido después de trabajar con muchos profesionales que se enfrentan a esta situación, los pasos a dar que dan su fruto son:
• En primer lugar deja de preguntarte “por qué a mi”.
• Comparte tu situación con otras personas para bajar el nivel de ansiedad. Bien sabemos que la verbalización nos ayuda a desahogarnos, al mismo tiempo que nos vamos dando cuenta de que realmente hay muchas cosas que puedo y debo poner en marcha.
• Escribe tu objetivo a corto y medio-largo plazo. Sobre todo en el medio-largo plazo busca tu sueño. Esta fase requiere de una reflexión profunda sobre todo el aprendizaje obtenido a lo largo de tu carrera.
• Poner en marcha acciones diferentes. Atrévete a cambiar. Este paso es el más importante ya que tener pequeños avances, te permitirán “manejar” los mensajes de negatividad que te lanza tu saboteador.
Hay que ser consciente que lo que valía hace unos años ha dejado de funcionar. Intentar hacer lo mismo que has hecho en otras situaciones cuando el mercado ha cambiado tanto, no te ayudará en esta fase tan crucial. Te animamos a que pidas ayuda si no tienes clara la estrategia a seguir. Eso hará que ganes tiempo y cojas el camino correcto. Hay muchas personas que han pasado por este proceso y han conseguido su objetivo.
¿Por qué no conocer su experiencia?.

Escrito por Marisa de Diego.