Mi Búsqueda

Cuando en mayo de 2017 tomé la decisión de abandonar mi empresa, la empresa que había lanzado junto a mi socio cuatro años atrás, y en la que tanto esfuerzo e ilusión había depositado, supuso un trago amargo, difícil de asumir….pero había que hacerlo, y sobre todo había pensar en la forma de hacerlo.

Al principio se me vino el mundo abajo; no me lo podía creer… ¿Otra vez a buscar?, ¿Ahora que pensaba que nunca más iba a tener que hacerlo?…..¿Y cómo empiezo?; ¿A quién llamo?; ¿Qué le digo?…..Bueno, el caso es que empecé a llamar, fundamentalmente a contactos profesionales y amigos, pero sin mucho orden, y sobre todo sin un discurso claro. Pedí ayuda también a alguien para que me ayudara a mejorar mi CV y carta de presentación…..pero aún así no estaba obteniendo los resultados deseados. Me ponía como disculpa que era junio ya, que la gente estaba más pensando en verano, que por eso tampoco me estaban haciendo mucho caso……pero en el fondo sabía que algo no estaba haciendo bien, y que si no empezaba a utilizar una estrategia adecuada, muy probablemente los resultados no llegarían. En este punto es cuando me acordé de Marta y de Marisa. Ya había hablado con ellas – e incluso había hecho el POP (Programa de Orientación Profesional)- en el año 2012, y aunque en su día no les había hecho mucho caso, su método sí me había parecido interesante, y supe que posiblemente algún día me vendría muy bien.

Así, a la vuelta decidí retomar el proceso de búsqueda. Me quedó clarísimo que mi discurso era muy poco convincente, era confuso y transmitía poca seguridad. A partir de ahí, empecé las reuniones individuales con Marisa, y el discurso fue mejorando, así como la seguridad en mí mismo, el orden, la estrategia……Pero sobre todo desde el principio me quedaron tres cosas muy claras que desde Marta y Marisa me transmitieron:

  1. El proceso de búsqueda de empleo implica preparación; y preparación a conciencia: hay que tener preparado el discurso para cualquier momento (por la calle, por teléfono, con un amigo, con un contacto profesional,….) porque nunca sabes dónde te va a poder surgir la oportunidad, y hay que estar siempre Hay que huir de la improvisación.
  2. No hay contactos malos; sólo son malos los que no se hacen. La oportunidad de tu vida te puede llegar del sitio y de la persona más insospechada; por eso cuanto más gente sepa que estás buscando – y por supuesto lo que estás buscando – mucho mejor.
  3. Y por supuesto: constancia, constancia y constancia

Con estos tres conceptos muy claros, “me puse las pilas”, y empecé a llamar, a quedar con gente, a mandar emails, a contactar por linkedIn….muchos días eran frustrantes, pero sabía que era el camino y que tarde o temprano iba a llegar. Mientras tanto, por supuesto, Marisa me iba ayudando: pulíamos ciertos aspectos de mi discurso, me comentaba en qué momento hablar con determinada persona…..pero siempre estaba ahí, para ayudarme, para echarme una mano….como también lo han estado las personas a las que he conocido.

¡¡¡¡¡Y finalmente llegó!!!!; primero una oferta que no me satisfizo plenamente; pero después la definitiva, y antes de que hubieran pasado tres meses de haber empezado mi búsqueda aplicando una nueva estrategia..

Marisa, Marta y María José, y por supuesto el resto de personas que me han ayudado…muchísimas gracias….sin vosotros esto no lo hubiera logrado!!!. Sólo espero poderos devolver algún día el favor y la ayuda prestadas.

Escrito por Pelayo Goizueta.