Conocí a Marta Gil-Casares hace ocho años. La conocí en un momento de transición profesional y en ese momento me invito a hacer el taller y a conocer su método. Tuve suerte y en muy poco tiempo y sin dejar mi trabajo me surgieron propuestas interesantes. No hice caso y entonces no me apunte.
En junio de 2015 después de dos años profesionales muy complicados, tanto en lo personal como en lo profesional, era consciente de que mi trayectoria en la empresa en la que estaba trabajando terminaría en diciembre 2015 y que tenia que empezar a buscar nuevas oportunidades de manera profesional y organizada. La coyuntura económica ya no era la misma y pese a que mi experiencia profesional era mucho mas dilatada, fui consciente de que debería buscar trabajo de una manera profesional. Me acorde entonces de Marta y me puse en contacto con ella. En julio estaba haciendo el pop con otros cuatro compañeros y entonces me di cuenta de todo lo que me quedaba por delante: Conocer las empresas en las que por mi experiencia podía aportar valor, hacer un mapa de búsqueda, explotar mis contactos (y los contactos de mis contactos) ordenar mi mensaje de salida sin hablar mal de la compañía en la que había trabajado, explicar mi experiencia profesional de forma solida, conocer mis puntos fuertes y los débiles. Hacer mi CV para que fuera eficaz en la transmisión de mis activos profesionales, identificando mis éxitos, trabajando trabajando sobre mis responsabilidades, pero lo que era mucho mas importante, buscar un método de búsqueda, un método “científico” con el que desde el principio, supiera que hacia bien y que hacia mal.
Todo el equipo de Marta, Marisa de Diego especialmente (que es quien ha bregado –y como!- conmigo) y María José Lasarte, estaban siempre para ayudarme, para aconsejarme, apoyándome, haciendo feedback de mis acciones.
Al principio, como todos los que participamos en el taller y después aplicamos su método de busca, estaba perdido. Mas tarde cuando ya entendí que hacer y como, pase momentos de desaliento y desesperación. Marisa siempre estaba allí, alentándome en el trabajo mas ingrato que nunca tuve. Un trabajo por el que no te pagan y en el que los resultados nunca sabes cuando surgirán. Marta y su equipo confiaban en mi, incluso cuando yo no lo hacia y ellas han sido un motor para que no parase.
Me puse como objetivo ver a dos contactos relevantes cada día (muchos head hunters) y en enero fui consciente, de que si bien hay que trabajar todos los frentes, con nuestra experiencia, edad y trayectoria profesional, la oportunidad me llegaría a través de uno de los muchos contactos a los que estaba viendo durante esos meses.
He tenido durante estos meses varias oportunidades y he participado en muchos procesos, algunos fallidos, otros en los que he dicho que no , otros proyectos en los que sigo colaborando…
Finalmente en el mes de junio(el día 21), me propusieron un puesto y de manera absolutamente inesperada, diez días después, en un proceso “exprés” me incorpore en la compañía en la que estoy hoy, feliz, posiblemente en el proyecto que mas me esta llenado profesionalmente , con 27 años de experiencia a mis espaldas.
Que me ha pasado en estos meses: Tengo una agenda profesional muchísimo mas rica, he tenido acceso a profesionales que jamás me hubiera imaginado que se sentarían conmigo a departir sobre un sector, posibilidades de un país o proyectos profesionales. He madurado muchísimo y lo que es mas importante, he aprendido a mover mis contactos, a buscar un trabajo de manera ordenada, conociéndome a mi mismo mucho mejor e identificando sectores, compañías y accionistas a los que con mi experiencia les puedo aportar valor.
Marta, Marisa y María José, gracias por este año de soporte, de consejos, de seguimiento y de inestimable ayuda.
A los que como yo hace un año, os encontráis sorprendidos por una situación (temporal) profesional no deseada, confiar en Marta Gil-Casares (y en su equipo), en su método y en su experiencia y lo que es mas importante si cabe, confiar en vosotros mismos!!! Con trabajo y método lo conseguiréis como lo he hecho yo.
¡Muchas gracias!
Escrito por Manu González Tarrío.